Un dÃa vino a nosotros y no habÃa nadie en casa, la mayorÃa de la familia se habÃa ido al campo, incluidos mis tÃos, y los dos nos quedamos en nuestra casa. Sara estaba muy cansada porque acababa de llegar del trabajo y querÃa ducharse, después de que me dijo esto, comenzaron a aparecer diferentes pensamientos en mi mente. Jul, llevé a Sara al baño y le di una toalla limpia. Después de salir, comencé a esperar en la puerta del baño. Empecé a mirar a Sara a través del agujero de la puerta. HabÃa espumado su cuerpo y estaba empezando a excitarme aún más. Abriendo lentamente la puerta, me acerqué a él, y finalmente, abriendo la puerta de la cabina de ducha, me paré frente a él. Al principio se sorprendió un poco, pero sus ojos empezaban a brillar.
Sin prestarle atención, me emborraché a su lado y tomé su cuerpo brillante entre mis manos, su cintura, que se deslizaba entre mis manos, me estaba haciendo crecer la polla decentemente y me alejaba de diciembre. Fui detrás de ella y comencé a follarla por el culo, mi polla entraba y salÃa muy cómodamente porque ya estaba espumosa. Empecé a follar más duro con la comodidad que esto me dio. Por un lado, estaba follando su hermoso culo por detrás, por otro lado, estaba acariciando sus pechos, haciéndola aún más placentera. Tirando de su cabello mojado, estaba firmando por un placer más ardiente. Follamos como locos en el baño entre las burbujas y disfrutamos al máximo del momento decantándonos de la manera más hermosa.